Espías de Felipe II

Una mirada a los agentes del imperio.

Servicio de Espionaje de Felipe II

Este diseño es un trabajo con el que pretendemos tributar una de las facetas más apasionantes y, sin embargo, desconocidas de nuestra Historia que se enmarca de una manera especialmente profusa durante el reinado del mencionado monarca. Un soberano de poder pentacontinental que sostuvo la bóveda de su gobierno con varios brazos siendo uno de ellos, además del de las armas con los Tercios como fuerza de choque, el de la red de espionaje y embajadas sitas en las metrópolis más notables de la Cristiandad europea, así como de la poderosa órbita otomana.

Diseño del Servicio de Espionaje de Felipe II de Legado Hispánico

Centro neurálgico de información.

En primer término presentamos el perfil arquitectónico del palacio-monasterio de San Lorenzo de El Escorial como epicentro, no sólo de la Corte y, por ende, el núcleo mismo del Imperio; sino como centro de una tupida red de inteligencia. 

En el zócalo de la construcción puede leerse la siguiente frase: “al servicio secreto de su majestad”. Una cita, conocida en nuestro tiempo gracias a las novelas y adaptaciones que se han hecho del agente del MI6 007 pero que, sin embargo, ya era popular en plena modernidad gracias a la extensa urdimbre de información y diplomacia creada por Felipe II. 

También por ello y, como feliz guiño cinéfilo de cultura popular, figura en la letra O de espionaje el famoso “gun barrel” o cañón del arma usado por el espía secreto más famoso de la pantalla grande.

Espías de Felipe II
Religiosos ejerciendo el espionaje

“La España de Felipe II contó con los servicios de espionaje más avanzados de su tiempo. Su extensa red de espías fue uno de los factores por los que mantuvo su estatus de potencia hegemónica. Ninguna otra nación dedicaba tantos recursos humanos y materiales a la inteligencia.”

Carlos Carnicer“Espías de Felipe II”

A ambos lados del perfil constructivo de San Lorenzo, lindando con los torreones, figuran los nombres de Idiáquez y Urbizu; dos de los más famosos agentes del rey.

Como se puede observar en el diseño, penden del Monasterio a modo de móvil una serie de líneas urbanas o skylines pertenecientes a las ciudades de Génova, Viena, Roma, Estambul (o Constantinopla), Londres y París. Todas ellas, y alguna más que no figura pero tenía igual importancia como Bruselas, se acompañan en su ala inferior con el nombre de un espía que, al servicio del Imperio, desarrolló junto a sus respectivos enlaces la actividad del espionaje en los ámbitos palatino y social de cada metrópoli expuesta.

Los nombres, a los que habría que sumar los dos primeros que flanquean San Lorenzo de El Escorial, son: Renzo, Khevenhüller, Vargas, Margliani, Creswell y Mendoza. Y son únicamente algunas de las figuras, quizá las más famosas, eso sí; pero ni mucho menos todas las que conformaron el circuito de investigación avanzada afín a Felipe II. El monarca se encargaba, asimismo, de revisar en última instancia cada despacho impreso o mensaje criptográfico con el celo de quien tiene la llave de la geopolítica global.

Espías complementos femeninos
Complementos femeninos para la comunicación no verbal

En resumen, desde El Escorial se manejaban los designios de Europa y el mundo conocido de ultramar mediante una espesa red de confidentes, mensajeros y diplomáticos pagados con fondos reservados de la Monarquía y que, moviéndose en esferas que basculaban entre el más eminente glamour y los espacios más sórdidos; mantenían activo un puntero escudo de estrategia y ambiciosa política exterior como pocas veces se ha visto en la Historia. Estos espías se dedicaban netamente a la inteligencia pero, sus enlaces y vectores, procedían de personas que compatibilizaban sus actividades profesionales con el mundo de los informadores. Casos que merecen la pena señalar en este aspecto son los de los de los insignes dramaturgos Cervantes o Lope de Vega.

Solo con ellos, con los que trabajaron como agentes al servicio secreto de su majestad, España pudo mantener su estatus de potencia hegemónica en los cuatro puntos cardinales del orbe.

Espías de Felipe II
Profesional liberal ejerciendo de agente de espionaje

Libros sobre Espías de Felipe II

Libros sobre el Servicio de Inteligencia de Felipe II